» La forma y el método de la lógica satisfacen esa ansia de certidumbre y de reposo que alberga toda mente humana. Pero generalmente la certidumbre no es más que ilusión, y el reposo no es el destino del hombre. Detrás de la forma lógica yace un juicio acerca del valor y la importancia relativos de fundamentos legislativos contrapuestos, un juicio que permanece generalmente inarticulado e inconsciente, es verdad, pero que no por ello deja de ser raíz y nervio de todo proceso « ( Holmes, 1897:29 ). Arjona Sebastià, César, » Los votos discrepantes del Juez O. W. Holmes», IUSTEL, 2006, primera edició.